Pruebas de autos argentinos

Chevrolet Corsa II CD 1.8 5p vs Fiat Palio 1.8 HLX 5p Enemigos íntimos Revista Parabrisas Nro 311 Septiembre de 2004

Unidos por una alianza, los exitosos compactos utilizan un mismo propulsor. En este comparativo, el producto de la marca italiana, fabricado en Brasil, se mostró más ágil; el de General Motors, producido aquí, más seguro

Pocos años atrás, Fiat y General Motors intercambiaban paquetes accionarios que se traducían como "la inminente compra" de la italiana por parte de la norteamericana. Pero muchas idas y vueltas entre las dos automotrices llevaron finalmente a enfriar esa relación comercial.

Sin embargo, no todo terminó ahí, ya que se realizaron alianzas estratégicas que todavía perduran. Una de ellas se denomina Powertrain, y el objetivo es la producción conjunta de motores, cajas de velocidades y plataformas. Esa sociedad (de 50 y 50), con plantas en Brasil y Europa, dio sus frutos, y recientemente se adoptó en el Palio el mismo propulsor que utiliza uno de sus rivales directos, el Chevrolet Corsa.

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Hasta hace poco, este motor 1.8 se utilizaba en modelos que no se enfrentaban en el mercado; pero, esta vez, los dos pequeños y exitosos se transformaron en "enemigos íntimos".

Hoy ambos coquetean con los primeros puestos del ranking de ventas del país; el Corsa, con sus versiones bicuerpo y tricuerpo, que se fabrica en Rosario, tiene una excelente performance, mientras que el Palio (que Ilegal Brasil), lo sigue de cerca. Si a eso se agrega el Siena como modelo complementario de tres volúmenes, la lucha es muy pareja.

Dadas sus coincidencias, estos autos se encuentran a la par en performance, pero cada uno marca diferencias en sintonía con la filosofía que cada empresa pretende para su producto. Entonces, a la hora de decidir qué modelo elegir, hay que saber qué es lo que realmente se espera de cada uno de ellos.

Como primera impresión distinguimos al Palio como el más ágil y equipado, y al Corsa como el más seguro y confortable.

Por volúmenes de ventas y propuestas, el nuevo Fiat Palio y el Chevrolet Corsa son, por el momento, dos fuertes referentes.

Según nuestro criterio, el diseño del Fiat tiene un corte más vanguardista. Pese a sus años, el reciente restyling que pasó por la trompa y la cola lo mantiene atractivo. En este sentido, el trabajo de Giorgetto Giugiaro le cayó muy bien si se tiene en cuenta que utilizó la misma plataforma. El sector frontal, con ópticas grandes y rasgadas que encierran faros circulares, y la parrilla con nuevas tomas de aire, lo ponen al día. Visto de atrás, los nuevos faros y la forma del portón recuerdan bastante al Stilo.

El Corsa, en cambio, mantiene desde el 2002 el mismo diseño, con un estilo más conservador. Derivado del modelo europeo, el Chevrolet denota una influencia más germana, pero que no pierde actualidad. Se destaca de atrás por la ubicación de las luces de freno sobre los parantes, un recurso que recuerda mucho al Ford Focus.

Aerodinámicamente presentan ruidos de viento a altas velocidades, pero se nota más en el Palio a partir de 140 km/h. Los coeficientes son similares: 0,32 para el Corsa y 0,33 para el Palio.

Ambos mantienen la misma habitabilidad que venían ofreciendo. Ingresar, tanto adelante como atrás, no acarrea ningún inconveniente en ninguno de los dos casos.
Pero el Corsa ofrece una posición de manejo más confortable, con pedalera de buena profundidad, butaca cómoda e impecable volante forrado en cuero.

El Palio, por su parte, tiene un asiento más mullido, con una posición de manejo más elevada (el asiento no se regula) y una pedalera que no es tan cómoda como en el Corsa. Atrás también saca ventajas el producto de Chevrolet, con un asiento más cómodo y mejor aprovechamiento a lo ancho. Por su parte, el Fiat ofrece un poco más de lugar para las piernas, pero la sensación de espacio está más acotada.

En cuanto a los baúles, ambos disponen de una capacidad bastante reducida, pero el Palio saca leves ventajas con 290 dm3 contra 270 dm3 del Corsa. Cada uno ofrece la posibilidad de abatir los respaldos traseros en mitades para ampliar la capacidad.

Dinámicamente el Palio se mostró inquieto, debido al mullido de las suspensiones

He aquí un aspecto importante. Sabemos que los propulsores son los mismos: nafteros de cuatro cilindros, con 1.796 cm3, y 8 válvulas. Pero, más allá de sus similitudes en cubicaje, la firma italiana se encargó de marcar algunas diferencias para mantener el espíritu "sport" que le imprime a sus autos. La potencia declarada del Chevrolet es de 102 caballos a 5.200 revoluciones, mientras que la del Fiat es de 105 CV a 200 rpm más.

Esta diferencia a favor del Palio se obtuvo al incrementar la relación de compresión de 9,4: 1 a 10,5: 1, lo que se traduce en que también su torque aumentó de 16,8 kgm a 17,3 kgm al mismo régimen. Si a eso se suma que las relaciones de caja del Fiat son más cortas y que pesa algunos kilos menos, las respuestas de aceleración, velocidad y elasticidad resultan mejor que en el Chevrolet.

En lo que se refiere a la aceleración, como se dijo, el Fiat saca ventajas con 10,9 segundos para alcanzar los 100 km/h, contra 11,6 del Corsa. En los 1.000 metros también aventaja el Palio con 32,8 segundos contra 33,4. También gana por poca diferencia en velocidad final (183,2 contra 180,1). Y marca la mayor brecha en elasticidad. Para ir de 60 a 120 km/h en cuarta, el Corsa utiliza 15 segundos, y el Palio lo hace en 13,5. De 80 a 120 km/h en quinta, el producto de la marca italiana opaca a su contrincante con 11,8 segundos contra 16,7.

Pero no todas son contras para el Chevrolet, ya que en el consumo promedio saca una leve ventaja: promedia entre ruta y ciudad, 12,4 km/l, contra 12,1 km/1 del Fiat Palio.

El Corsa dinámicamente se mostró superior, con un desempeño óptimo

Para el diseño de los interiores del Palio, el departamento de estilo se inspiró un poco más. Esta nueva versión recibió un tratamiento que lo acerca más a vehículos de segmentos superiores, con texturas, plásticos y tapizados agradables. Pero el Corsa, portador de un diseño algo más anticuado, tiene una presentación interior muy cuidada. Desde cualquier punto de vista, el Chevrolet es más conservador, por la forma del panel central y la combinación de comandos. Una característica común en los vehículos germanos.

El instrumental del Fiat (con fondo negro e iluminación anaranjada) es de nuevo diseño y permite una lectura ágil y sencilla, además de disponer de computadora de abordo que indica, entre otras cosas, consumo, autonomía, kilometraje, velocidad promedio y tiempo de viaje. El tablero del Corsa (con fondo blanco e iluminación ámbar) ofrece la misma información que el Fiat, pero carece de computadora de abordo. La lectura también es clara y sencilla.

Sobre la consola central, ambos modelos disponen de prácticos reproductores de audio: el Fiat con CD y MP3, y el Chevrolet con casete y cargador para 6 CDs desde una misma boca. En los dos casos, el sonido es de lo mejor entre los vehículos de su segmento.

El equipamiento es muy parejo; sin embargo, el Fiat carece de un elemento que es muy común hoy en día: un telecomando para abrir las puertas a distancia.

Suspensión - Dirección

En este aspecto, el Chevrolet tiene un comportamiento superior, con un desempeño dinámico que casi no se puede criticar. Las suspensiones son firmes, confortables, y se aprecia su actitud franca en rutas y caminos desparejos. El Palio, en contrapartida, se muestra confortable en ciudad pero mucho más inquieto para doblar rápido, debido a lo mullido de las suspensiones. Un tema que Fiat ha pasado por alto en todas las generaciones del modelo.

Las direcciones son de piñón y cremallera asistida en cada caso. La del Palio se muestra más sensible a los "llamados" del volante, pero muy eficaz para estacionar. El Chevrolet transmite mayor seguridad en la respuesta, con una asistencia coherente para maniobrar en espacios reducidos.

Transmisión - Caja

Como se dijo, las relaciones de caja del Palio son un poco más cortas, lo que permite sacar mayor provecho del motor cuando hay que acelerar. Otra diferencia que encontramos se da en el accionamiento de la selectora, que en el Corsa se mostró más dócil y en el Palio más "gomosa" e imprecisa. También la configuración de la marcha atrás es diferente: en el Fiat hacia atrás yen el Chevrolet hacia adelante, ambos con anillo de seguridad.

Durante las pruebas de aceleración, el Palio presentó mayores patinamientos del tren de tracción, aunque no perjudicaron los valores en las pruebas.

Seguridad - Frenos

A la hora de frenar, el Chevrolet hizo notar una mayor eficacia del sistema con un tacto de pedal más agradable y mejor dosificación del pedal. La resistencia a la fatiga es buena en ambos casos, así como el trabajo del ABS del Corsa, no disponible en la unidad de Fiat. El Palio, en cambio, reflejó una desagradable tendencia al bloqueo y una limitada dosificación del pedal.

En las pruebas de 100 km/h a 0, el Corsa utilizó 44,4 metros contra 47,6 del Palio. En este aspecto hay que considerar el compuesto y el desgaste de los neumáticos (con más uso en el Fiat), como también el ancho de la banda de rodamiento, mayor en el producto de GM.

Los dos traen doble airbag, cuatro apoyacabezas y luces antiniebla delanteras. Pero el Corsa cuenta con un quinto cinturón inercial y regulación de altura de faros. El poder lumínico de ambos es similar, aunque la visibilidad es mejor en el Palio, ya que en el Corsa queda muy limitada hacia atrás por la forma de los parantes.

Precio

El Palio HLX de 5 puertas, con el pack denominado Emotion, cuesta $ 29.300; si a eso le sumamos el ABS (1.480 pesos), el reproductor de MP3 ($ 740) y la pintura metalizada ($ 260), el precio final queda en $ 31.780. En cambio el Corsa, en versión CD (con ABS y un muy interesante nivel de equipamiento) se ofrece a 31.900 pesos.

La conclusión, después de varios cientos de kilómetros por todo tipo de caminos, es que si hilamos muy fino, el Fiat está medio escalón más arriba que el Chevrolet en nivel de equipamiento y algunas prestaciones. Pero el Corsa se lleva las palmas por su comportamiento dinámico, nivel de seguridad y confort interior. Dos autos muy coherentes, con motores iguales, que responden a la filosofía de cada marca.

Por Augusto Brugo Marco
Fotos Marcelo Escayola
Colaboró Leo Rodríguez

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CONCLUSIONES

El instrumental del Palio, con fondo negro e iluminación anaranjada, es de nuevo diseño y permite una lectura sencilla. Además dispone de computadora de a bordo

El tablero, con fondo blanco e iluminación ámbar, ofrece la misma información que el Fiat, pero carece de computadora

EQUIPAMIENTO

Chevrolet Corsa

Fiat Palio

- Aire acondicionado. - Dirección asistida. - 4 levantavidrios eléctricos. - Cierre central de puertas con comando a distancia. - Autoestéreo con cargador para 6 CDs y pasacassette. - ABS. - Doble airbag. - Parasoles con espejos. - Butaca del conductor regulable en altura. - Espejos eléctricos. - Luz antiniebla delantera. - Cinco cinturones inerciales. - Volante regulable en altura. - Guantera con luz. - Volante forrado en cuero.

- Aire acondicionado. - Espejos eléctricos. - Dirección asistida. - Luz antiniebla delantera. - 4 levantavidrios eléctricos. - Cuatro cinturones inerciales. - Cierre central de puertas. - Volante regulable en altura. - Autoestéreo con CD y reproductor de MP3 - Porta-anteojos - Computadora de abordo. - ABS (opcional). - Apertura interna de baúl y tanque de combustible. - Doble airbag. - Parasoles con espejos. - Apoyabrazo central delantero. - Guantera con luz. - Alarma de velocidad.

DETALLES

Chevrolet Corsa

Fiat Palio

✓ Al abrir las puertas, las ventanillas delanteras bajan unos centímetros para que no se genere vacío en el habitáculo. ✓ El autoestéreo funciona sin la llave en contacto. ✓ La guantera creció en dimensiones, tiene luz, pero carece de cerradura. ✓ Sobre el techo del lado del conductor hay un práctico porta-anteojos abatible. ✓ Cuando el auto comienza a moverse, los seguros de las puertas bajan automáticamente. ✓ Los cuatro levantavidrios poseen doble sistema one-touch.

✓ El autoestéreo funciona sin la llave en contacto. ✓ Posee una práctica alarma que avisa cuando se supera un límite de velocidad que se puede predeterminar (ideal para carreras de regularidad o para evitar multas). ✓ El cenicero no tiene luz. ✓ Posee tres posavasos (dos delanteros y uno trasero). ✓ Los cuatro levantavidrios delanteros poseen one-touch. ✓ Los respaldos traseros se abaten en mitades asimétricas, pero los cojines quedan fijos.

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