Además de perfil le cambia radicalmente el aspecto del auto, hace que la cola parezca más corta y el volumen trasero de menor altura, efecto éste evidentemente originado en la línea quebrada del nuevo parante trasero.

Como ya dijimos, estas modificaciones se pueden realizar sobre cualquier modelo de Falcon, nuevo o usado, y el costo es de aproximadamente $ 16.000 (Nota de TDA: Equivalentes a u$s 1.600 según el sitio elnotarioargentino.com.ar), cosa variable de acuerdo a las pretensiones y gusto de cada uno, porque este tipo de auto tiene además la virtud de construirse de acuerdo al gusto del dueño.

La cola fue modificada con los paragolpes y a los costados se prolongó el faldón interior de los guardabarros así como los labios del mismo. El caño de escape sale del centro del paragolpes y hacia un costado. Muy deportivo

Además, en la parte mecánica hay pequeñas mejoras: se bajó en 3 cm la altura del auto -gracias al corte de una vuelta de espirales de suspensión- y barras estabilizadoras más duras. En lo que a motor toca, los fabricantes del POLME -así se llama este Falcon- no realizan ningún tipo de mejoras, pero en plaza hay un sinnúmero de accesorios y partes para aumentar el rendimiento del mismo.

Perfil del POLME. Color no convencional, parante trasero alargado hacia atrás (uno de los aciertos estilísticos más grandes del auto) y fileteado muy personal

Pero mejor remitámonos a las fotos que valen mucho más que las palabras... y si quieren más datos de este fuera de serie diríjanse directamente a sus fabricantes, en la Av. Córdoba 59 al 65 de San Juan, y Dios no llamen cada quince segundos a nuestra redacción a la hora de la siesta..

Héctor Ripoll muestra la salida del aire que, canalizado a través de la toma NACA del capot, desemboca en el radiador de aire. Probablemente se ganaron unos 5 km/h más de velocidad máxima, aunque todavía no finalizaron las pruebas de este implemento

El Blog de Test del Ayer: Ford Falcon Polme visto en San Juan